Uñas otoño 2025: los cuatro estilos que dominarán la temporada
La moda ya no se queda en la ropa: las uñas se han convertido en un accesorio imprescindible para definir el estilo de cada temporada. Este otoño 2025, la manicura se reinventa entre la sofisticación y la creatividad, apostando por acabados que evocan texturas, naturaleza y lujo silencioso. Estas son las cuatro tendencias que marcarán el ritmo:
1. Tonos tierra: el regreso a lo esencial
Desde el terracota hasta el café intenso, los tonos tierra llegan con fuerza como reflejo del deseo de volver a lo natural. Funcionan tanto en manicuras cortas y elegantes como en uñas más largas y almendradas. Son la opción perfecta para quienes buscan discreción con un toque sofisticado: neutros cálidos que combinan con cualquier look otoñal.
2. Efecto glaseado: brillo sutil con espíritu Y2K
El efecto glaseado —ese acabado perlado y traslúcido que parece envolver la uña en una capa de azúcar brillante— sigue siendo protagonista, pero ahora se lleva en clave otoñal. Piensa en bases nude o beige con destellos rosados o dorados que atrapan la luz. Es la manicura que grita elegancia minimalista con un guiño moderno.
3. Estilo francés reinventado
El clásico nunca muere, pero cada temporada encuentra su nueva versión. Este otoño, la manicura francesa se moderniza con puntas en tonos tierra, metálicos suaves e incluso con un toque glaseado. El resultado es un equilibrio perfecto entre tradición y tendencia, ideal para quienes buscan sofisticación sin renunciar a la creatividad.
4. Efecto aterciopelado: lujo al tacto de la mirada
La gran novedad de la temporada es el efecto aterciopelado: un acabado que, gracias a los polvos magnéticos, crea la ilusión de una textura suave y tridimensional sobre la uña. Lo veremos en tonos borgoña, verdes profundos y marrones chocolate, evocando la calidez de un abrigo de terciopelo. Una manicura que convierte las uñas en auténticas joyas.
La manicura como accesorio de moda
Más que un detalle, las uñas son el broche final de un estilismo. Este otoño 2025, la tendencia es clara: acabados que combinan naturalidad, brillo y texturas inesperadas. Desde lo orgánico de los tonos tierra hasta la sofisticación futurista del efecto glaseado o aterciopelado, las uñas se confirman como un lenguaje silencioso de estilo.